miércoles, 30 de abril de 2008

De bien nacidos…

Queridas queridísimas y queridos queridísimos,
Hace 200 años, tal día como pasado mañana, unos cuantos pobladores de la Villa y Corte decidieron que se habían cansado de los gabachos y salieron a la calle a repartir estopa. Y les dieron pal pelo. Los gabachos a los de Madrid, claro. Después pasaron muchas más cosas, pero supongo que ya las habéis oído o leído.
Casi 78 años más tarde (por apenas un día), unos cuantos pobladores de Chicago decidieron hacer una huelga para pedir la jornada laboral de ocho horas. Dos días después, la policía cargaba contra una concentración y mataba a seis de los susodichos. Los obreretes en cuestión se lo tomaron a mal y, para contarlo todo, se cargaron a un policía a las 24 horas. Resultado: un puñado de juicios y cinco condenados a la horca.
Hoy, miércoles 30 de abril, me siento más madrileño y más trabajador que nunca. Yo, que jamás me habría enfrentado al ejército francés (me tiemblan las piernas sólo de pensarlo) y que tampoco me veo mucho poniéndome delante de la policía (corro a gran velocidad si la ocasión lo requiere), me deshago en elogios por lo que consiguió esta gente: ¡convertir un miércoles en viernes!
Sí, criaturitas: en Madrid es puente. Y eso que nos llevamos puesto. Y mañana, a estas horas, espero estar en el Cabo de Gata con la moza, que ya hemos comprado el kit de playa en el chino y que incluye chanclas, sombrilla y palas (y todo por 20,40 euros, cómo no van a conquistar el mundo).
Así que gracias a todos los que han hecho esto posible: ¡¡¡La canción del viernes!!! llega el miércoles. A ver si descifran el jeroglífico:





¡A bailar!

Besos a tutiplén.
Sean felices.

P.D.: ¡Todos somos Blanco Herrera!
P.P.D.: Pili, ¿dónde estarás? Un beso adicional para ti.
P.P.P.D.: Y más besos para todos, leñe

viernes, 25 de abril de 2008

Los viernes no tienen precio

En una semana multicolor
Llegó del viernes la canción
Y fue famosa en el lugar
Porque a todos hacía bailar

¿Qué hay más bonito que el atardecer en Granada? ¿Que la sonrisa de tu hijo al llamarte papá? ¿Que coger de la mano a tu pareja mientras paseas por la playa? ¿Que la gratitud de un ser querido? Leñe, pues ¡¡¡la canción del viernes!!! Lo demás es filfa. Vale, vale, que sí, que sí. Es precioso y tal y qué sabré yo y patatín y patatán. Pues nada, lo dejáis para el resto de la semana, que tiene seis días más y hoy lo que toca es irse ¡a bailar!
Al lío, al lío:



Y qué me decís de esto:



Besos a tutiplén.
Sean felices.

P.D.: ¡Todos somos Blanco Herrera!
P.P.D.: Hay cosas que no tienen perdón. Después de los meses que llevo con esta historia, hay gente que debería estar aquí desde hace tiempo. En fin, soy un desastre con las direcciones de mail. Hoy, por fin, he buscado algunas en los correos de La Dirección, que todavía no se ha aprendido lo de la copia oculta. Así que un beso para los tres nuevos iniciados. Antonio, Long John Javi y Manolo… ¡A bailar!
P.P.P.D.: María, darling, los jueves sin ti deben ser aburridísimos.
P.P.P.P.D.: Más besos, leñe.

viernes, 18 de abril de 2008

Ni lluvia ni gaitas

Está lloviendo. Un viernes. ¿Y qué? ¡La canción del viernes! no entiende de aguas mil ni otras zarandajas. Aquí hemos venido a bailar. Y bailaremos. Como el fin de semana pasado. Estuvo aquí La Dirección. Buscamos a Blanco Herrera. Seguimos sin saber por dónde anda. Y eso que revisamos hasta el último rincón. Podéis estar seguros. Necesitamos ayuda en todos los puntos de España. Mi trabajo está en juego. Yo lo haría por vosotros. Así que ya sabéis, carretera y manta:



Ésta es la última pista sobre el paradero del susodicho:



No me falléis.
¡A bailar!
Besos a tutiplén
P.D.: Sean felices.
P.P.D.: ¡Todos somos Blanco Herrera!
P.P.P.D.: Más besos, coñe.

viernes, 11 de abril de 2008

Glups, La Dirección

Queridas queridísimas y queridos queridísimos,
Sólo lo voy a decir una vez: ¡¡¡La canción del viernes!!! ya llegó. Bueno, lo voy a decir otra: ¡¡¡La canción del viernes!!! ya llegó. Y mírala qué mona es. Aquí tenéis: el fin de semana enterito para que retocéis, salgáis, bebáis y, sobre todo, bailéis, bailéis, bailéis y bailéis.
Y para que los jóvenes vean que nosotros también estamos ‘in’, más o menos, ahí van estos mozalbetes. Sé de una a la que voy a hacer muy feliz:



¡Ring, ring! ¡Ring, ring! Vaya, una llamada imperiosa. La Dirección. Que qué pasa con lo de Blanco Herrera. Que no lo encuentran. Que ya está bien. Que va a tener que tomar cartas en el asunto. Que viene a Madrid, vamos. Miedito me da. Trae material para investigar. Tecnología punta de búsqueda, dice. Sólo hay que darle al play:



P.D: ¡Todos somos Blanco Herrera!
P.P.D.: Espero que el fin de semana sea clemente con vosotros y conmigo.
P.P.P.D.: Besos a tutiplén, ya sabéis.
P.P.P.P.D: Sed felices y comed perdices (menos Sergio y Chaves, que son vegetarianos. Pues nada, buscáis algo que rime con felices o a pasar hambre. Delicaítos sois).
P.P.P.P.P.D: Más besos, leche.

viernes, 4 de abril de 2008

De punta en blanco

Queridas queridísimas y queridos queridísimos,

Todos los días del año
yo soy feliz con mi gente
y cuando llega el viernes
estoy aún más sonriente

Sí, sí, sí. Si estáis leyendo esto es que lo habéis logrado, una semana más. Si no lo habéis logrado, siento no haber acudido a vuestro entierro. No me enteré. Pero no estamos de funeral, estamos de inauguración. Este blog nace de punta en blanco para ustedes, criaturitas. Para que lo tengan más fácil y para que yo, algún día, pueda decir: “Como ya dije en mi blog…”. Pero, sobre todo, para que vosotros, algún día, digáis: “Como ya dice en ¡¡¡La canción del viernes!!!…”. ¡Me haríais tan feliz! Bueno, en realidad, con un brindis ya molaría, así que ya podéis ir pidiendo unas cañas. Y ya está bien de hablar del blog, hablemos de vosotros: ¿qué os parece este blog?
Bueno, bueno, bueno, el otro día me dijo la María que ésta sería una gran ¡¡¡La canción del viernes!!!. Lo reflexioné unos dos segundos y me pregunté ¿cómo es posible que no haya sido la primera ¡¡¡La canción del viernes!!! Pues ahí va:



Y La Dirección envió otra, en su lucha por encontrar a Blanco Herrera. No desisten nunca estos chicos. Iba a ponerla directamente cuando me dije a mí mismo: “Un momento, mí mismo. Es primavera. ¿No has visto a las mozas con tirantes?”. “Sí”, me respondí. “¿No sería oportuno –alegué- conmemorar el solsticio o el equinoccio (dudaba mí mismo del término)?”. “Sí”, me repliqué mí mismo, parco en palabras. Pues ahí va:



Besos a tutiplén.

P.D: Cholita, espero que tu tesina haya ido como la seda.
P.P.D.: La Mavi descubrió el otro día ¡¡¡La canción del viernes!!!, qué cosas. Aquí tienes el archivo completo, guapetona.
P.P.P.D: Quiéranse, bésense, tóquenle el culo a las niñas, los niños, las cabras o las botellas. Muélanse a abrazos.
P.P.P.P.D.: ¡Todos somos Blanco Herrera!
P.P.P.P.P.D: ¡A bailar!
 
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